martes, 7 de diciembre de 2010

JMV COMATRANA - ICA

QUERIDOS HERMANOS DE JUMAVI:

Me siento muy alegre y contento al compartirles las grandes metas que se propusieron los chicos de JUMAVI - ICA - COMATRANA a lo largo del año, fueron experiencias muy agradables para cada uno de mis jóvenes integrantes, les podría contar: en el mes de junio después de 10 años se logró recuperar una tradición perdida en el pueblo de comatrana que era de llevar a San Pedro a Laguna Grande una tradición que se recuperó con el esfuerzo de la asociación y con la ayuda de los pescadores que deseaban que se con muchas ganas se recuperase esta tradición.

Otra de las grandes metas y creo yo la más importante fue en el mes de noviembre, mes de nuestra madre MARIA el cual fue el hacerle un novenario a nuestra madre de la MEDALLA MILAGROSA, algo que se logró con el esfuerzo de cada integrante y con la ayuda del pueblo de comatrana, fueron días de gran empeño de los integrantes y una de las mejores experiencias que haya tenido el grupo ya que era la primera vez que organizábamos un novenario, y salió muy bien, lo cual va a mejorar para el próximo año.
Asu vez, les compartimos que nos sentimos muy alegres al recibir la visita de Karla Lizet Rodríguez Espinoza, uno de los miembros de Consejo Nacional que estuvo presente en la misa de fiesta y procesión, donde observó el gran empeño de cada integrante.

Como ven, hemos vivido muchas experiencias que me faltarían palabras para contarles, experiencias que han fortalecido a todos mis integrantes, permitiéndoles identificarse con la Asociación. Les puedo decir que todo esto nos ha ayudado mucho, ya que ha colaborado con nuestro crecimiento espiritual.

Sin más que decirles me despido no sin antes expresarles mi estima personal.

EN CRISTO Y MARIA.

Ronald De La Cruz Solís
Coordinador JMV-Ica-Comatrana

sábado, 4 de diciembre de 2010

LA ALEGRÍA DE JMV CAJAMARCA

Es una alegría poder compartir con ustedes una experiencia más de Juventud Mariana Vicentina. Además compartir la experiencia vivida desde nuestra evangelización, es muy grato.
Sin duda, este es un campo que nos motiva mucho, yo les puede decir que uno de nuestros métodos efectivos es la misión, en el que creo firmemente como método evangelizador.
En toda actividad de los Jumavistas tiene que estar impregnado por esta inquietud misionera y evangelizadora.
El sábado 20 de noviembre nos dirigimos a Porconcillo; sitio en el cual nos encontramos con pequeñitos entre 6 y 12 años, como JMV quisimos ofreceles una propuesta nueva. Es por eso que les llevamos dinámicas y lecturas bíblicas acorde a su edad, aquí se pudo notar que mucho de los integrantes demostraron que aun siguen teniendo el alma de niños.
Sé que esta experiencia nos une como grupo y nos hace partícipes de una alegría pocas veces vista en unos niños que lo merecen todo.
El sábado 27 hubo una visita domiciliaria, de las que Jumavi Cajamarca nos ha acostumbrado y que fueron parte de nuestro plan anual. Esta vez la reunión fue en mi casa, fue una reunión muy emotiva donde se compartió la oración con los chicos JMV y con mi familia; seguidamente hubo el intercambio de regalos por parte de los “secret friends” que se empezó a realizar con un mes de anticipado a la navidad a fin de poder interactuar y compartir entre nosotros.
Tenemos también planeado realizar una chocolatada, que se llevará a cabo el 18 de diciembre, para los niños de Porconcillo. Nos sentimos muy orgullosos de haber emprendido este proyecto, estamos seguros que podemos ayudar a estos niños y la verdad es que son ellos los que nos han ayudado devolviéndonos la magia de ser niños, la alegría, y la fuerza de sus corazones”.
De este modo los JMV Cajamarca puede conocer más de cerca la realidad de cada uno de los niños para poder transmitir de un modo adecuado el mensaje de amor del Señor Jesús, preparándolos para la celebración de la Fiesta de la Navidad".

GAVI
JMV CAJAMARCA

jueves, 2 de diciembre de 2010

LAS ACTITUDES FUNDAMENTALES DEL ADVIENTO


  1. Actitud de espera. El mundo necesita de Dios. La humanidad está desencantada y desamparada. Las aspiraciones modernas de paz y de dicha, de unidad, de comunidad, son terreno preparado para la buena nueva. El adviento nos ayuda a comprender mejor el corazón del hombre y su tendencia insaciable de felicidad.

  2. El retorno a Dios. La experiencia de frustración, de contingencia, de ambigüedad, de cautividad, de pérdida de la libertad exterior e interior de los hombres de hoy, puede suscitar la sed de Dios, y la necesidad de «subir a Jerusalén» como lugar de la morada de Dios, según los salmos de este tiempo. La infidelidad a Dios destruye al pueblo. Su fidelidad hace su verdadera historia e identidad. El adviento nos ayuda a conocer mejor a Dios y su amor al mundo. Nos da conocimiento interno de Cristo, que siendo rico por nosotros se hace pobre.

  3. La conversión. Con Cristo, el reino está cerca dentro de nosotros. La voz del Bautista es el clamor del adviento: «Preparad el camino del Señor, allanad sus senderos; elévense los valles, desciendan los montes y colinas; que lo torcido se enderece, lo escabroso se iguale. Y todos verán la salvación de Dios ... » (Is 40,3-5). El adviento nos enseña a hacernos presentes en la historia de la salvación de los ambientes, a entender el amor como salida de nosotros mismos y la solidaridad plena con los que sufren.

  4. Jesús es el Mesías. Será el liberador del hombre entero. Luchará contra todo el mal y lo vencerá no por la violencia, sino por el camino de una victimación de amor. La salvación pasa por el encuentro personal con Cristo.

  5. Gozo y alegría. El reino de Cristo no es sólo algo social y externo, sino interior y profundo. La venida del Mesías constituye el anuncio del gran gozo para el pueblo, de una alegría que conmueve hasta los mismos cielos cuando el pecador se arrepiente. El adviento nos enseña a conocer que Cristo, y su pascua, es la fiesta segura y definitiva de la nueva humanidad.

ADVIENTO

La palabra latina "adventus" significa “venida”. En el lenguaje cristiano se refiere a la venida de Jesucristo. La liturgia de la Iglesia da el nombre de Adviento a las cuatro semanas que preceden a la Navidad, como una oportunidad para prepararnos en la esperanza y en el arrepentimiento para la llegada del Señor.
El color litúrgico de este tiempo es el morado que significa Penitencia.
El tiempo de Adviento es un período privilegiado para los cristianos ya que nos invita a recordar el pasado, nos impulsa a vivir el presente y a preparar el futuro.

Esta es su triple finalidad:

- Recordar el pasado: Celebrar y contemplar el nacimiento de Jesús en Belén. El Señor ya vino y nació en Belén. Esta fue su venida en la carne, lleno de humildad y pobreza. Vino como uno de nosotros, hombre entre los hombres. Esta fue su primera venida.

- Vivir el presente: Se trata de vivir en el presente de nuestra vida diaria la "presencia de Jesucristo" en nosotros y, por nosotros, en el mundo. Vivir siempre vigilantes, caminando por los caminos del Señor, en la justicia y en el amor.

- Preparar el futuro: Se trata de prepararnos para la Parusía o segunda venida de Jesucristo en la "majestad de su gloria". Entonces vendrá como Señor y como Juez de todas las naciones, y premiará con el Cielo a los que han creído en Él; vivido como hijos fieles del Padre y hermanos buenos de los demás. Esperamos su venida gloriosa que nos traerá la salvación y la vida eterna sin sufrimientos.